lunes, 5 de septiembre de 2011

Demuestra que eres el más fuerte de tu clase

Ahora que toca volver al cole, aquí tenéis un truco para demostrar que eres el más fuerte de tu clase. Esto lo descubrí en mitad de un caso en el que tuve de ayudante a un forzudo del circo. Se llamaba Miguel el Magnífico y a pesar de que era un hombre fortísimo, me dijo algo muy sabio:

- Anizeto, aunque me veas tan fuerte, a veces en la vida vale más maña que fuerza. Por ejemplo, cuando quiero fardar con mis amigos los payasos, los equilibristas, los domadores... no me hace falta usar los músculos. Simplemente junto dos dedos de las manos y no hay nadie capaz de separármelos.

Lo que ocurre, es que yo me quedé bizco, porque lo que me dijo es de esas cosas que no te las esperas. Aquí os he preparado un dibujo para que podáis hacerlo vosotros también.


viernes, 8 de julio de 2011

Meter un huevo en una botella

¿Nunca os ha pasado que descubrís algo detrás de un hueco pequeño pero no sois lo suficientemente "estrechos" como para pasar por él? Seguro que sí, lo que ocurre es que nuestros cuerpos, como están rellenos de hueso, igual que las aceitunas, no se pueden encoger.

Esto es todo lo contrario a lo que ocurre con un huevo de gallina. ¿Pensáis que es posible hacer pasar un huevo por el cuello de una botella? ¡Sin romperlo, por supuesto! Pues la respuesta es sí, y os voy a enseñar a hacerlo.

Todo lo que necesitáis es un huevo, una botella de cristal y una cerilla.

1) Lo primero que tenéis que hacer es cocer el huevo y pelarlo. Para esto tenéis que pedir ayuda a un adulto porque hay que usar el fuego de la cocina...

2) Cuando el huevo esté cocido, meted la cerilla encendida dentro de la botella (otra vez necesitáis a un adulto) y colocad rápidamente el huevo sobre el cuello de la botella.

3) Esperad unos segundos y veréis como el pobre huevo se va introduciendo hasta caer dentro de la botella.



La explicación es muy sencilla, la presión del aire dentro de la botella es menor debido a la combustión producida por la cerilla. De esta forma, el aire de fuera ejerce una mayor presión sobre el huevo que, al ser más o menos flexible, se termina metiendo en la botella.

miércoles, 22 de junio de 2011

Escribir con tinta invisible

Cuando uno es detective como yo tiene que escribir documentos con información de alto secreto que no pueden caer en manos equivocadas. Por eso, cuando quiero mantener segura la información lo que hago es escribir con tinta invisible. ¿Invisible?, os preguntaréis.  Por supuesto, y hoy os voy a enseñar a prepararla. Lo que ocurre es que no podéis desvelar el misterio a nadie.

Todo lo que necesitáis es el zumo de un limón, papel , una vela y un pincel. Mojad el pincel en el zumo de limón, escribid lo que queráis y luego acercad el papel a la vela. El calor hará que se oxiden los componentes del zumo de limón y, de repente, aparecerá lo que habéis escrito.

miércoles, 15 de junio de 2011

¿Dónde comprar cremor tártaro?

Hola a tod@s.

Las cosas a veces suceden de forma misteriosa lo que ocurre es que como yo soy detective no me doy cuenta porque gracias a mi sagacidad puedo resolverlas. El caso es que cuando empezamos a preparar el libro "Anizeto Calzeta y El Misterioso caso de los Fantasmas Solitarios" nuestra idea era incluir un sobre de cremor tártaro para poder fabricar plastilina casera. Al final ha sido imposible, pero para que no os quedéis sin hacer el experimento (gracias Antonio por tu comentario en la receta), os voy a decir dónde comprar este ingrediente.

El cremor tártaro se puede encontrar en farmacias que cuenten con laboratorio, en buenas droguerías y, por supuesto, en Internet por ejemplo aquí. La ventaja es que es bastante barato y no hace falta usar mucha cantidad.

martes, 31 de mayo de 2011

Fabricar huevos elásticos

El experimento de hoy no puede ser más sencillo. Consiste en hacer que la cáscara de un huevo de gallina normal y corriente se convierta en una goma elástica y transparente. Además, al dejarlo caer, el huevo botará un poquito.

Lo único que vais a necesitar para fabricar una "huevota" (porque se parece a una pelota elástica) es un huevo, un vaso lleno de vinagre, agua y un trapo.

Lo primero es meter el huevo en un vaso y llenarlo con vinagre. Luego dejad que el huevo repose dentro del vaso durante dos días. Cuando esté listo sacadlo, lavadlo bien con agua y secadlo con el trapo. Veréis que la cáscara se ha vuelto semi-elástica y el medio transparente. Cuantos más días lo dejéis en agua, más translúcida será la cáscara.


sábado, 21 de mayo de 2011

Fabricar plastilina casera

Hoy os voy a enseñar un experimento que aprendí en una página web americana un día que estaba navegando por Internet. El experimento consiste en fabricar plastilina casera. Sí, sí, con vuestras propias manos (y la ayuda de un adulto, claro). Además, la receta está chupada así, que vamos con ella.

Lo primero que vais a necesitar es crémor tártaro, un polvo blanco que se usa en las pastelerías para hacer merengue (por cierto, mi abuela me enseñó de pequeño a hacer "Fantasmas de merengue", y están de miedo, ja, ja...). Aunque eso de crémor tártaro os suene raro, no os preocupéis porque en mi libro "El Misterioso Caso de los Fantamas Solitarios" he incluido un sobrecito para que hagáis la plastilina.

Aquí va la receta:

1) Mezclad en un cazo un puñado de harina, un poco de sal y el crémor tártaro.
2) Añadid agua, colorante alimentario (elegid el color que queráis que tenga la plastilina) y un poco de aceite.
3) Removedlo todo bien para que no queden grumos.
4) Pedidle a un adulto que ponga el cazo en el fuego y lo deje a fuego lento entre 3 y 5 minutos. Mientras id removiendo la parte de abajo para que no se pegue y poco a poco iréis viendo que se la masa se pone dura y se forma una bola en el centro.
5) Cuando no esté pegajosa y tenga el aspecto de la plastilina, apagad el fuego y dejadla enfriar.
6) Echad un poco de harina en la mesa de la cocina o en una bandeja y rebozad un poco la plastilina, aplastándola y dándole bien la forma.
7) ¡Ya tenéis vuestra propia plastilina! Cuando no la vayáis a usar, guardadla en una bolsa dentro de la nevera.

Fabricar Olor a Lluvia

¿Alguna vez os habéis fijado en lo bien que huele la tierra mojada por la lluvia?, ¿nunca habéis dicho "hmmm... qué olorcito más bueno a lluvia"? Seguro que sí. Lo que ocurre es que claro, sin lluvia es difícil conseguirlo, ¿verdad? Pues tranquilos porque el padre de Ruedas, Larry Mosto, director general de la Fábrica de Fragancias, Sabores y Esencias, me enseñó a fabricar olor a lluvia sin salir de casa.



Tomad nota porque aquí va la receta:

1) Coged un cubo y una pala de los de la playa (y un recipiente cualquiera) y llenadlo con tres paladas (o puñados) de arena. De cualquier arena: del jardín, del campo, del parque, del río... Eso sí, intentad que no tenga piedra o guijarros demasiado grandes.

2) Buscad, o pedidle a vuestros padres, una fuente de horno, de esas de cristal o de madera que se usan para asar un pollo o cocinar una lasaña, y llenadla hasta la mitad con la arena que habéis cogido.

3) Echad agua en un vaso y rociadla por encima de la arena. Ayudaos con los dedos para que el agua caiga gotita a gotita sobre la tierra igual que si fuera.. ¿lo adivináis? ¡Lluvia, efectivamente!

4) Ahora pedidle Ayuuuudaaaa a un adulto para meter la fuente en el horno, donde debéis calentarla a temperatura media durante unos minutos dejando la puerta del horno entreabierta .

5) Cuando la arena se caliente toda la casa empezará a oler igual que el campo en un día de lluvia.

¿Fácil eh?